Beatriz Zamora
El Negro de Beatriz Zamora
Beatriz Zamora es una figura radical en el panorama de la pintura contemporánea, en la historia del arte moderno y contemporáneo que va de Malévitch a Ródtchenko, de Alberto Burri a Lucio Fontana, pasando de Ad Reinhardt, Frank Stella, los minimalistas. Junto a Piero Manzoni, Umberto Mariani y Pierre Soulages. Al decir de Gérard-George Lemaire, esta historia no ha dejado de enriquecerse y ha estado marcada por el deseo de abordar una experiencia bien definida a través de la investigación del monocromo, …y lo sublime. A ello Beatriz Zamora ha consagrado su vida y donde El Negro le es suyo.
Por su propia deriva existencial, El Negro de Beatriz Zamora hoy está inscrito en la historia de larga duración. Beatriz Zamora lo inicia en México en 1977. Antes, se escuchó en el mundo, más allá del arte: The black is beautiful. La excepcionalidad performática de su obra plástica consiste en haberla realizado, más allá del tabú patriarcal en Occidente y su sentido de vacuidad obtusa. Su radicalidad estética logró penetrar el mundo desde la materialidad plástica, para manifestar las profundas relaciones humanas subyacentes en nuestro entorno expandido y cósmico, desde la consciencia.
Desde su origen y con su serie La Tierra, como precursora entrañable e iconoclasta de 1976-1977, inicia simultáneamente una conversación ética con la matriz civilizatoria milenaria de México y de nuestra América Latina profunda. Beatriz Zamora lo ha hecho y acompañado amorosamente, durante todo este periodo histórico que emergió entonces y que toca a su fin, con todas sus consecuencias desatadas. Esto permite redirigir por naturaleza propia, la mirada de El Negro a la conversación profunda con los otros pueblos del mundo que siempre han estado ahí, cuidándolo y conversando con él, en su respuesta humana planetaria, en el presente.
Francisco Hernández Zamora.
03-06-2024